Obviamente, si eres una anciana de 60 años y tienes los huevos de echarte un amante veinteañero para serle infiel a tu marido cornudo, tienes que estar segura de poder mantener el ritmo del maromo en cuestión, o pronto te dejará para follar coños más jóvenes. De hecho, este chico pensaba que follaría una vez con esta abuela liberada y no más, pero cuando vio el ritmo que llevaba la puta madura, quedó tan encantado que se convirtió en su querido oficial; y es que no hay más que ver cómo folla la muy cerda, cualquier jovencita con muchos años menos sentiría en envidia de ver cómo es capaz de echar el polvo más alucinante sobre una mesa como si fuera cualquier cosa.