Poca gente sabe que, cuando va a la tienda de ultramarinos de esta pelirroja madura, se lleva un plus en su compra antes de salir del local. A ella no le va nada eso de las ofertas, pasa de las campañas veraniegas; pero, eso sí, premio a los clientes fieles, y se los folla antes de darle el ticket de compra. Joder, ha visto cómo las ventas subían como la espuma, y es normal. Los tíos, que se pelean por hacer la compra en vez de sus mujeres, adoran su coño peludo y caliente, que los lleva a la corrida sin remedio. Y, si no es así, ya se encarga ella de que eyaculen en su boca con el sexo oral.