Esta pelirroja alemana llevaba más de 30 años trabajando en esta empresa como asistente de dirección. De hecho, entró en el puesto cuando el padre del actual director era el jefe, y ahora lo es el hijo. A la secretaria sesentona ya le toca jubilarse, hoy es su último día en la oficina. Y no cabe duda de que su jefe la tiene en mucha consideración, o al menos eso piensa ella. Porque ¿a quién se le ocurre darle el finiquito por jubilación con polvo incluido? Nunca había escuchado que el padre hiciera algo así, al menos no en aquella empresa. Debía ser una nueva moda que implantaban las nuevas generaciones; como sea, ella se llevó un creampie vaginal aparte del cheque.