No sé si para ser secretaria una tiene que demostrar tener un coño muy caliente, o hay algo en ese trabajo que hace que tras unos años de estar en ese puesto, las mujeres se conviertan en unas calentorras insufribles; y lo peor es que, al tener que estar unas horas en sus puestos, tiene que apañarse como sea para quitarse los calentones. Algunas lo arreglan tirándose al jefe o a alguno de sus compañeros, pero otras, menos atractivas o más maduras, o quizá más impacientes, se apañan llevándose sus consoladores a la oficina, como todas las de este video porno.